Bárbara.

De Cáceres a Madrid, de Madrid a Valencia y de Valencia a Sevilla. Por amor al arte.

martes, 8 de febrero de 2011

Somos tres


1.  Vivo en el espejo, solo soy cristal, y a través de él, lo veo todo. Soy la imagen de la reflexión, soy la que recuerda donde se hayan, quien en silencio dice mucho más, reflejo sus rostros, emiten gestos, yo los pongo ante ellas, y se marcan para siempre, ellas deciden y actúan, y yo las miro con indiferencia, esperando cansada que me saquen de aquí..

2. Yo soy la que manipula cada imagen, cada acontecimiento, cada uno de los estados, cada miedo, cada odio, cada momento, y cuido de la tercera, que solo se encarga de limpiar el espejo cuando se mancha de sangre, ella solo limpia la ira, ella no puede encargarse de esto, su mente es débil, por eso estoy aquí.

3. Está, se va a la calle, sonríe y miente, a veces es como si no viviera con nosotras, a veces.. Lo destroza todo.. Yo lloro por ella, la temo, la amo y la compadezco, siempre en voz baja.
Yo agonizo el dolor que quiebra en sus dientes cuando aprieta sus mandíbulas de rabia.



3. Yo lloré dentro de ella, yo pedí morir por favor, mientras la escuchaba gritar de impotencia, pidiendo mil explicaciones o una salida. Yo vomitaba la vida frente a un inodoro, suplicando con las rodillas hincadas en el suelo, resbalando por los azulejos de la pared el sudor de manos sin fuerzas. Yo cierro los ojos, tapo mis oídos, y ella es el impulso, ella arranca su piel a tiras buscando un alivio, una persona en el espejo mira, parece que no va con ella..

2.Y es que no lo soporto, me hierve la sangre, quiero pararlo y no puedo, quiero callarla y tampoco.. Quiero una solución y no la tengo, tenemos un acuerdo y yo lo llevo a mi manera. Estallo. Cuando la veo derrumbarse y tirar de ella duele, cuando veo que entre tabiques solo yo sigo dispuesta a esto, y las arrastro conmigo a un lugar donde sé que no son felices. Y aunque de malos modos, solo pido que esperen un poco más, prometo la calma, ya queda poco. Y aquella desconocida del espejo dejará de recordarnos donde dolió, y no será mas que una sonrisa de llegada en el mueble de la entrada de otra casa..

1. Siento intriga por saber quien seré, qué reflejaré, dónde estaré.. Pero mientras tanto sigo encerrada en esta lámina. Sí, miro con cara de indiferencia tal vez, ya estoy algo cansada de que a mi no se me pueda engañar, viene se cura las heridas delante de mi, después se viste y pretende hacerme creer que no hay nada en su piel antes de marcharse. Me culpa, parte mis cristales.. Mas yo solo permanezco, ella recurre a mi para saber donde está..